A mi Sarita

A veces todo se ve tan claro como una noche de jueves.

Cuentas los días, las horas, los momentos que pasas aquí, allí.

Se arruga la frente, se marchitan las palabras, vuelven primaveras.

Es un círculo, son ciclos.

Después de un tiempo diferencias lo que vale de lo prescindible,

lo que amarga de lo inútil, lo complejo de lo absurdo,

Lo utópico de los sueños. Diferencias un tú y un yo.

Un espacio tan grande o pequeño, según quién lo mire.

Desde aquí las estrellas no se ven, pero se sienten. Con mucha fuerza.

Son de esas, no sé como explicarlo, de esas que te alegran un abril pasado,

iluminan un oscuro rostro o tocan un agridulce blues a medianoche.

Hablo de esas personas, de esas que son y que están. Que no se quieren ir.

Que permanecen porque, por alguna razón, les perteneces y te pertenecen.

Porque hay vínculos tan fuertes que son inexplicables. Y recuerdas tanto.
Porque realmente existe gente muy especial caminando con nosotros.

Porque hoy ha sido un día especial lejos, pero Sarita, aquí estoy igual que sé que estás.

Feliz Cumpleaños (aquí aún no es medianoche :p).

En mi ipod suena: Golfa - Extremoduro :)